domingo, 22 de agosto de 2010

Capitulo 2

EL PRINCIPIO DEL MAL


Llegaron las vacaciones de verano muy rápido. Ya no había colegio, por lo que podíamos estar hasta tarde en la calle, antes hasta las ocho, ahora hasta las diez o las once.

Una tarde de esas le estaba mostrando a Arco el estanque de detrás del edificio, bueno más bien paseando porque íbamos de la manita como una parejita, pero era porque me caía cada dos por tres y así podía agarrarme antes de caer.

De repente oímos algo caer en el centro del estanque. Nos acercamos y lo atrajimos hacia la orilla. Era un cadáver, pero no uno cualquiera, era el del profesor de matemáticas, Francis.

Tenía algo raro, una especie de mordisco en el cuello que me dio un escalofrío, se lo mostré a Arco y me aparto rápidamente. Su cara no era de asombro como la mía, era de extrañeza, seguramente estaría pensando en que fuera otra persona, ante la duda iba a preguntarle que le parecía pero no me atreví, tal vez por la respuesta que recibiría.

Arco me alejo de el cadáver y lo dejemos en la orilla, Arco me acompaño a mi habitación mientras me agarraba de la cintura para que no me cayera, nada más llegar a las habitaciones del centro llamamos a la policía, seguido me acompaño a mi habitación, se despidió con un beso en la frente.

Por la mañana llegaron los coches patrulla y entre las caras de los niños había preocupación, miedo y tristeza. Estaba claro que ese día no se podía ir al estanque. Recordé que la mordedura no era normal, ya que no se veían más que dos punzadas, como si fueran las mordeduras de dos… colmillos.

Estuve toda la tarde enfrascada en la biblioteca buscando noticias parecidas, pero no había muchas, y encima eran sobre vampiros, los no muertos,… eso no podía ser, los vampiros no existen por lo que era imposible que eso hubiera pasado.

A la semana siguiente pasó lo mismo, pero esta vez fue Marta la que encontró a la profesora de arte, Georgina, en el bosque. La profesora tenía los mismos mordiscos que el profe de mate. Yo creía que era el mismo asesino, ya que los dos tenían las mismas punciones, y en los mismos sitios. Era extraño pero la policía no quiso escucharme, así que pase del tema.

1 comentario:

Malinka dijo...

wow me encanto lo q e leido x ahora!! te sigo, sigue asi ^^

muac